MULHACÉN, CARA NORTE. 2 DÍAS POR LA VEREDA DE LA ESTRELLA.

29 y 30 de Marzo. Al final hubo cambio de planes y la salida que teníamos programada este fin de semana, para ir al Vignemale, ha quedado pendiente. Posiblemente iremos en el puente de Mayo... haber si estamos todos los colegas para entonces.
Los que estábamos, decidimos ir a Sierra Nevada un par de días (sábado y domingo) para adentrarnos por la, siempre larga, pero muy bonita Vereda de la Estrella.
Tarí y yo salimos de Elche a las 5'30 h. y tras parar, unos minutillos, a tomar un cola-cao y hacer un pi... retomamos la autovía para llegar a Granada. Pero justo 1 km. antes de salirnos de ella, para entrar a la circunvalación que sube a la sierra, ¡ñaca! pilotos, freno, punto muerto y a esperar... tres cuartos de hora parados en la autovía y cola de varios kilómetros, se ha prendido fuego un camión y los bomberos no han podido hacer nada, pues cuando han llegado ya estaba todo más que "chamuscao", ha sido cuestión de un plis-plas, y no ha quedado nada.
Bueno, a las 10'30 h. comenzamos a caminar, en la espalda unos 15-16 kg. La temperatura es bastante agradable. Cruzamos el río por el puente que hay frente al aparcamiento y un operario de la Junta de Andalucía que controla el Parque, nos hace una entrevista tipo test para saber si conocemos la zona, si sabemos a donde vamos, si llevamos todo lo necesario, si tenemos experiencia, en fin, todo eso que se pone en los test... nos parece bien. A continuación nos comenta: "por favor si veis a unos chavales que van con zapatillas de tenis, sin material de escalada, con los sacos colgando por fuera de la mochila, que no conocen el itinerario, etc. etc... hacerles desistir de su empeño, pues hay mucha nieve y al parecer pretenden subir el Mulhacén..?" Entonces digo yo, para que sirve el test si uno de esos chavales hubiera tenido un accidente..?
En fin, nosotros a lo nuestro. Caminamos rápido y en unas 3 horas estamos en Cueva Secreta. Hacemos un descanso, comemos una naranja y seguimos. De pronto, los vemos, son inconfundibles, los chavales de las zapatillas de tenis, no cabe duda, los tenemos enfrente. Suben por una senda hacia lo alto de una loma y de repente comienzan a descender, desorientados, hacia el punto de partida por otra senda. Luego se adentran, siguiendo el curso del río, por el Valle de Valdecasillas... nos quedamos tranquilos, por ahí, no llegaran muy lejos y seguramente acamparan cerca. Seguimos subiendo y los perdemos de vista.
Remontando el Valle de Valdeinfiernos, comienza a chispear, vemos unos relámpagos y los truenos amenazan tormenta. El cielo se ha puesto gris. Nos metemos bajo un gran pedrusco y aprovechamos para comer un bocata e hidratarnos, mientras pasan las nubes. Las vistas desde este punto hacia la Alcazaba son magníficas, sobre todo su cara Oeste. Se dibujan algunos corredores y líneas de hielo, pero, practicamente la pared está limpia de nieve. También las Chorreras de la Mosca están escasas de hielo. Seguimos. Pasamos por el pié de la Pared N-NE del Juego Bolos, un sencillo 3000, vecino del Mulhacén y del Puntal de la Caldera. Remontamos toda la pendiente helada, para alcanzar el rellano de la Laguna de La Mosca. Buscamos un lugar donde pasar la noche. Durante un rato, Tarí, está picando en la nieve para habilitar una plataforma, al abrigo de un gran bloque de roca, mientras yo voy levantando una mureta de piedras para protegernos del posible viento nocturno. Son más o menos las 20 h. Cenamos algo y al "sobre", ahora hace un frío que pela, ha bajado la temperatura varios grados. La noche se presenta muy fría. Cambiamos la hora del reloj, toca hoy de madrugada adelantar una hora.
Hemos "dao" más vueltas que una trompa... ¡que frío! ni dentro del saco.
Poco después de las 6'30 h., aún de noche, vemos varios puntos de luz atravesando por la base de la Cara Norte del Mulhacén, son dos cordadas. Apuramos algo más dentro de los sacos y al rato, nos ponemos manos a la obra, preparamos todo el material, desayunamos unos zumos, galletas y chocolate y guardamos, al pié de la roca, una mochila con todo lo que no vamos a utilizar en la escalada. Cruzamos la hoya de la laguna de la Mosca y enfilamos "to tieso" un cono bastante pendiente, para luego ir en diagonal hacia la izquierda, buscando el canuto central. La nieve esta de lujo y las huellas que seguimos duras. A la mitad +/- encontramos una plancha de hielo, 60º, sacamos la cuerda para asegurar el paso, las huellas se pierden, llenas de nieve y trozos de hielo que caen desde más arriba. El entorno empieza a ser "espectacular" pues ya estamos bastante altos. Mi intención es salir directos a la cima, pero, una muralla de roca, algo vertical, nos cierra el paso. Vemos que las otras cordadas se han desviado hacia la izquierda para salir por la arista, más fácil, pero, nosotros flanqueamos a la derecha, superamos un diedro, luego una travesía por bloques cargados de témpanos de hielo, provocados por efecto del viento y después recto por la pared, nos aseguramos en varios pasos con friends y puentes de roca. Por fín ¡Cumbre! justo salimos a sólo 10 metros de la cima del Mulhacén 3.482 m., la montaña más alta de la península ibérica. Hay gente en la cumbre y se acercan a ver por donde hemos escalado. Luego, 3 de ellos, nos comentan que son de Novelda, ¡vaya! que somos vecinos... nos hacen unas fotos terminando la escalada.
Unos abrazos y las típicas fotos en la cumbre, son el complemento a esta actividad, una clásica por excelencia de Sierra Nevada.
Aunque a nosotros todabía nos queda bajar a la Laguna de la Mosca, a recoger los bártulos dejados en el vivaq y después todo el descenso por la Vereda de la Estrella hasta llegar al coche (llegaríamos sobre las 20 h.), este momento de descanso y tertulia en la cima no lo cambiaríamos por nada del mundo...